
El COVID-19 ha paralizado el mundo y ha provocado una crisis global. Pero ¿qué impacto tendrá al final de esta pandemia en las empresas, sean grandes, medianas o pequeñas empresas?
La pandemia que estamos viviendo en esto momentos obligará a las empresas a repensar sus estrategias, administración financiera, procesos de suministros, formas de trabajo y el espacio de oficinas físicas e instalaciones industriales.
Es por ello por lo que es fundamental que se aprovechen las oportunidades que esta situación está ofreciendo para ajustar y hacer un giro de 360° en la manera en la que se está operando.
Un nuevo cambio, una nueva oportunidad
El futuro en el mundo empresarial comienza a partir de ahora, adaptándose a nuevas realidades, estrategias, así como modos de operación y producción. El mundo de los negocios deberá adaptarse a un nuevo entorno competitivo mundial, a cambios en patrones de consumo y claro, la necesidad de una nueva forma de trabajar, rendir cuentas y producir resultados.
Ante esta situación los líderes deberán revisar si cuentan con estas destrezas indispensables para sobrevivir en el nuevo orden mundial.
Con el Covid-19 se están viendo señales tempranas de un cambio en el comportamiento de los consumidores y las empresas. Las empresas tecnológicas y no tecnológicas están alentando el trabajo remoto, por ejemplo. Algunos de los cambios que se están percatando son respuestas directas a corto plazo a las crisis y volverán a niveles normales una vez que se contenga esta contingencia. Sin embargo, algunos de estos cambios continuarán, creando una interrupción digital a largo plazo que dará forma a las empresas en las próximas décadas.
Tres grandes dimensiones del impacto que se vendrá
Esta pandemia que se está viviendo está teniendo un impacto directo en las dimensiones biológicas, psicológicas y económicas del mundo.
La innovación a largo plazo y los cambios en las tendencias se producirán a medida que los consumidores y las empresas intenten seriamente normalizar el impacto en las dimensiones psicológicas y económicas. Siempre y cuando se alcance la contención y se resuelva el impacto biológico. Queda bastante claro que tanto las pandemias como las recesiones son aceleradores de la innovación en lugar de ser causas directas de la misma.
El acelerador de la transformación digital
Las personas han sido expuestas al impacto del trabajo Digital de forma intempestiva. Han comprobado entre otras cosas que pueden administrar mejor su tiempo balanceando el trabajo con su vida social, optimizar su interacción con otros colaboradores, ahorrar el tiempo de viaje a/desde la oficina.
Las empresas han comprobado que el colaborador virtual se puede gestionar eficientemente, que la productividad aumenta y que pueden ahorrar sustancialmente en costos de oficina.
La experiencia forzada está generando un cambio drástico de opinión en las personas más escépticas, acelerando la curva de adopción. De alguna manera, se podría decir que el COVID-19 ha actuado como un acelerador de la transformación digital.
Luego de esta experiencia, desde muchos ángulos exitosa, ¿quién realmente piensa que el mundo volverá a funcionar como antes?
La tecnología y seguridad para la nueva forma de operar ante la pandemia
A partir de lo que estamos viviendo, habrá mayores inversiones en tecnologías y en seguridad. Muchas de las empresas que hoy no pueden realizar procesos remotos y que posean la solvencia económica harán inversiones en proyectos que le permitan asumir trabajo remoto en las actividades que se faciliten para ello.
Estas inversiones de las empresas estarán basadas principalmente en procesos y productividad en la nube, con lo que las inversiones serán menores que la propia adquisición, en consecuencia, los servicios administrados de TI, que permitan gestionar procesos empresariales tendrán una mayor demanda.
También será relevante, para todas las empresas, considerar factores de seguridad que hasta el momento no se han evaluado completamente. Como lo eso garantizar que la data este cifrada, que nadie pueda obtener el file de transferencia o sitios de colaboración con áreas seguras de trabajo, un ejemplo de lo que las empresas van a como lo que ha ocurrido recientemente con la aplicación de vídeo conferencia ZOOM donde se han detectado fallas de seguridad.
¿Pero, cómo prepararse ante una realidad de cambios globales?
Las empresas alrededor del mundo, que consideren una transformación digital, serán entonces las que tomen acción inmediata durante la contingencia. Esto con el fin de humanizarse internamente como externamente con soluciones distintas a lo habitual y que también cuenten con la visión de entender a un nuevo consumidor y prepararse para continuar en un ambiente más ambiguo y cambiante que antes, donde las reglas del juego en todos sus ámbitos serán muy distintas a cuando no se tenía la contingencia en el mundo. Hoy las empresas pueden ser innovadoras y transformar, con eficiencia, su entorno laboral y con ello generar grandes resultados.
Por: Ricardo Meneses